miércoles, 23 de mayo de 2012

El Vacío de las Irresponsabilidades

Podría resistir cualquier dolor, podría aguantar aunque mis piernas temblasen apenas sosteniéndome en pie. Sé que podría hacerlo, no sin esfuerzo y sufrimiento, no sin la tentación de abandonar. Pero mientras mi mente este fuerte, mientras mi orgullo permanezca y mis ganas de lograr cosas persistan, seguiré luchando, cueste lo que cueste. Cualquier daño físico sería reparable, vencible.


Pero en este caso, es mi mente la que esta cansada, la que intenta desaparecer, borrar la información innecesaria. Ella es la que no puede más, la que grita y aúlla sin que nadie la oiga, nadie excepto yo. Yo, que no puedo taparme los oídos y simplemente dejar de oír. Sus llantos permanecen ahí, invisibles a simple vista, pero ahogando mi interior. Quisiera tener un botón de on-off, para poder desconectar aunque fuera tan solo un segundo, pero desconectar completamente. Dejar mi mente casi muerta, sin actividad cerebral donde apenas cupieran las preocupaciones. Pero no puedo, y tan solo puedo fingir que no pasa nada tras un cansancio mental que me impide pensar con claridad. Yo, que tan solo busco respirar en el vacío de las irresponsabilidades.

No hay comentarios:

Publicar un comentario